Camoati
Camoati (camuatí o
camachui) es el nombre común con que se designan a varias especies de avispas
(himenópteros) en Argentina y Uruguay, en particular se refiere a la especie
Polybia scutellaris.
Son avispas
eusociales que forman enjambres numerosos cuyos nidos de cartón penden en su
mayoría de los árboles, pero también lo hacen en rocas así como en los techos
de casas y galpones.
Producen una miel
oscura y algo áspera. La composición química de dicha miel y también de la
toxina que inyectan con su aguijón han sido estudiadas.
El mismo nombre
reciben los nidos de estos insectos.
El Género Polybia
Polybia es un género
de avispas eusociales de Sudamérica (Brasil y Argentina). Algunas hacen miel
que recolectan los indígenas y que se recolecta todavía.
La picadura de ésta
contiene una fuerte toxina llamada MP1 que mata selectivamente las células
cancerígenas sin afectar las células sanas.
Taxonomía
Reino: Animalia
Filo: Arthropoda
Clase: Insecta
Orden: Hymenoptera
Suborden: Apocrita
Familia: Vespidae
Subfamilia: Polistinae
Género: Polybia
Filo: Arthropoda
Clase: Insecta
Orden: Hymenoptera
Suborden: Apocrita
Familia: Vespidae
Subfamilia: Polistinae
Género: Polybia
Especies
Polybia aequatorialis
Zavattari, 1906
Polybia affinis Buysson, 1908
Polybia anglica Cockerell, 1921
Polybia barbouri Bequard, 1943
Polybia batesi Richards, 1978
Polybia belemensis Richards, 1970
Polybia bicytarella Richards, 1951
Polybia bifasciata Saussure, 1854
Polybia bistriata (Fabricius, 1804)
Polybia brunnea (Curtis 1844)
Polybia brunneiceps Cameron, 1912
Polybia catillifex Moebius, 1856
Polybia chrysothorax (Lichtenstein)
Polybia depressa (Ducke, 1905)
Polybia diguetana Buysson, 1905
Polybia dimidiata (Olivier, 1791)
Polybia dimorpha Richards, 1978
Polybia divisoria Richards, 1978
Polybia eberhardae Cooper, 1993
Polybia emaciata Lucas, 1879
Polybia erythrothoraxla Richards, 1978
Polybia fastidiosuscula Saussure, 1854
Polybia ficaria Richards, 1978
Polybia flavifrons Smith, 1857
Polybia flavitincta Fox 1898
Polybia fulvicauda Cameron, 1912
Polybia furnaria Ihering 1904
Polybia gorytoides Fox 1898
Polybia ignobilis (Haliday 1836)
Polybia incerta Ducke 1907
Polybia invertita Giordani Soika, 1965
Polybia jurinei Saussure, 1854
Polybia juruana Ihering, 1904
Polybia laboriosa Saussure, 1853
Polybia liliacea (Fabricius, 1804)
Polybia luctuosus Smith, 1858
Polybia lugubris Saussure, 1854
Polybia micans Ducke 1904
Polybia minarum Ducke 1906
Polybia nausica Richards, 1951
Polybia nidulatrix Bequard, 1933
Polybia nigriceps Zavattari, 1906
Polybia nigrina Richards, 1978
Polybia oblita Cockerell, 1921
Polybia occidentalis (Olivier, 1791)
Polybia parvula
Polybia parvulina Richards, 1970
Polybia paulista Ihering, 1896
Polybia platycephala Richards, 1951
Polybia plebeja Saussure, 1867
Polybia procellosa Zavattari 1906
Polybia pseudospilonota Giordani Soika, 1965
Polybia punctata Buysson, 1908
Polybia quadricincta Saussure, 1854
Polybia raui Bequard, 1933
Polybia rejecta (Fabricius, 1798)
Polybia richardsi Cooper, 1993
Polybia ruficeps Schrottky, 1902
Polybia rufitarsis Ducke 1904
Polybia scrobalis Richards, 1970
Polybia scutellaris (White, 1841)
Polybia selvana Carpenter, 2002
Polybia sericea (Olivier, 1792)
Polybia signata Ducke 1910
Polybia simillima Smith 1862
Polybia singularis Ducke 1909
Polybia spilonota Cameron 1904
Polybia spinifex Richards, 1978
Polybia striata (Fabricius, 1787)
Polybia sulciscutis Cameron, 1912
Polybia tinctipennis Fox 1898
Polybia uruguayensis (Giordani Soika, 1965)
Polybia velutina Ducke 1907
Polybia affinis Buysson, 1908
Polybia anglica Cockerell, 1921
Polybia barbouri Bequard, 1943
Polybia batesi Richards, 1978
Polybia belemensis Richards, 1970
Polybia bicytarella Richards, 1951
Polybia bifasciata Saussure, 1854
Polybia bistriata (Fabricius, 1804)
Polybia brunnea (Curtis 1844)
Polybia brunneiceps Cameron, 1912
Polybia catillifex Moebius, 1856
Polybia chrysothorax (Lichtenstein)
Polybia depressa (Ducke, 1905)
Polybia diguetana Buysson, 1905
Polybia dimidiata (Olivier, 1791)
Polybia dimorpha Richards, 1978
Polybia divisoria Richards, 1978
Polybia eberhardae Cooper, 1993
Polybia emaciata Lucas, 1879
Polybia erythrothoraxla Richards, 1978
Polybia fastidiosuscula Saussure, 1854
Polybia ficaria Richards, 1978
Polybia flavifrons Smith, 1857
Polybia flavitincta Fox 1898
Polybia fulvicauda Cameron, 1912
Polybia furnaria Ihering 1904
Polybia gorytoides Fox 1898
Polybia ignobilis (Haliday 1836)
Polybia incerta Ducke 1907
Polybia invertita Giordani Soika, 1965
Polybia jurinei Saussure, 1854
Polybia juruana Ihering, 1904
Polybia laboriosa Saussure, 1853
Polybia liliacea (Fabricius, 1804)
Polybia luctuosus Smith, 1858
Polybia lugubris Saussure, 1854
Polybia micans Ducke 1904
Polybia minarum Ducke 1906
Polybia nausica Richards, 1951
Polybia nidulatrix Bequard, 1933
Polybia nigriceps Zavattari, 1906
Polybia nigrina Richards, 1978
Polybia oblita Cockerell, 1921
Polybia occidentalis (Olivier, 1791)
Polybia parvula
Polybia parvulina Richards, 1970
Polybia paulista Ihering, 1896
Polybia platycephala Richards, 1951
Polybia plebeja Saussure, 1867
Polybia procellosa Zavattari 1906
Polybia pseudospilonota Giordani Soika, 1965
Polybia punctata Buysson, 1908
Polybia quadricincta Saussure, 1854
Polybia raui Bequard, 1933
Polybia rejecta (Fabricius, 1798)
Polybia richardsi Cooper, 1993
Polybia ruficeps Schrottky, 1902
Polybia rufitarsis Ducke 1904
Polybia scrobalis Richards, 1970
Polybia scutellaris (White, 1841)
Polybia selvana Carpenter, 2002
Polybia sericea (Olivier, 1792)
Polybia signata Ducke 1910
Polybia simillima Smith 1862
Polybia singularis Ducke 1909
Polybia spilonota Cameron 1904
Polybia spinifex Richards, 1978
Polybia striata (Fabricius, 1787)
Polybia sulciscutis Cameron, 1912
Polybia tinctipennis Fox 1898
Polybia uruguayensis (Giordani Soika, 1965)
Polybia velutina Ducke 1907
Abeja Africana
Son
originarias del sur de África y llegaron al continente americano
hacia el año 1956 por Brasil, con la intención de obtener una
especie mejorada que tuviese las cualidades de la abeja Italiana (es la que
tenía en el continente Americano) la cual es dócil, de fácil manejo, no
enjambra y lo más importante, su conducta defensiva ha sido atenuada.
Cruzamiento
Las abejas
africanizadas son las abejas más peligrosas del planeta. Son híbridos
procedentes del cruzamiento de la subespecie natural africana Apis mellifera
scutellata con abejas criollas naturalizadas del continente sudamericano,
pertenecientes a varias subespecies de A. mellifera, como Apis mellifera
mellifera, Apis mellifera iberica y posiblemente otras.
La particularidad de
estos híbridos es su acentuado comportamiento defensivo, altamente heredable,
describiéndose como muy agresivos ante molestias. Atacan en cantidad, muy
velozmente y siguen a su víctima hasta a 900 metros de su colmena
o enjambre. Este comportamiento ha provocado en América numerosas
muertes de personas, incrementándose anualmente el número registrado de
víctimas.
Características
La Abeja Africanizada
tiene varias características de la abeja africana original, por lo cual puede
reproducirse rápidamente y los zánganos fecundan a las reinas de las colmenas
europeas, convirtiendo las nuevas colonias en africanizadas.
Popularmente se les
ha dado a las abejas africanizadas el nombre incorrecto de "Abejas
Asesinas, debido a que tienen un sentido de defensa muy fuerte, característica
que las ha convertido en abejas mucho más agresivas. A partir de la huida de
las primeras reinas y enjambres de las abejas africanas, se han producido
muchísimas muertes de animales domésticos y personas, debido al ataque de tales
abejas, sobre todo cuando las colonias han sido molestadas accidentalmente.
Historia
Con el propósito de
incrementar la cosecha de miel en Brasil, se introdujeron
en 1957, cerca de São Paulo, 26 reinas de Apis mellifera scutellata
originarias de Tanzania; a fin de desarrollar un programa de mejora
genética a cargo de Warwick Kerr. Accidentalmente, estas abejas escaparon
gracias a un grupo de brasileños que estaban en el lugar de fumigación y le
abrieron la jaula a la abeja reina. La reina escapó y se hibridó con las abejas
melíferas naturalizadas de Brasil y Sudamérica en general.
A partir de ese momento, se expandieron por todo el continente de manera
constante. Avanzaron entre 150 y 300 kilómetros por año, llegando a América
central, México, y luego a los Estados Unidos, a los estados
de Florida, Texas, Arizona y California.
Picaduras
El veneno está
formado por una mezcla compleja de fracciones: fosfolípido; hialorunidasa;
melitina; fosfatasa ácida; alérgeno C; además de histidina, histamina y otros
componente menores. La glándula de veneno de este híbrido es mayor al de las
razas de abejas europeas: 147 versus 94 µg. La gravedad del envenenamiento
depende de la sensibilidad individual y del número de picaduras infringidas.
Así, en un sujeto
hipersensible puede ocurrir la muerte con una sola picadura pero ha habido
supervivientes de 500 picaduras. El veneno causa reacciones alérgicas y efectos
tóxicos. Las complicaciones que acarrean las múltiples picaduras de abejas
desencadenan el choque anafiláctico.
El veneno está
formado de unas series de torzoyaduras -llamadas también apis nepis-una serie
muy rara de picadura es la c-xf5, cuyo desarrollo se concluyó mediante un
estudio genético, en el que la abeja africanizada conforma 40 000
reproducciones en tan sólo 1 hora, dejando huella y varias muertes por casi
alrededor de 15 países.
Incidentes Ocurridos
En México se han
registrado, hasta 2003, 3000 accidentes y más de 300 muertes por estas
abejas. En Costa Rica se han registrado 30 casos de muertes.
En Colombia se han registrado más de 100 muertes y más de 400 heridos
por las picaduras de estas abejas. En Argentina se han reportado enjambres
invadiendo casas de familia matando a sus moradores.
Hay autores que han
comparado estas abejas con razas europeas describiéndolas como más productivas
en kilos de miel, otros concluyeron en sus trabajos que son menos productivas y
otros no encontraron diferencias, no existiendo unanimidad en este criterio.
Pero se puede inferir
mayormente que la africanización trae aparejada una disminución en la
producción de miel por dos motivos: La producción de miel está asociada
indirectamente con el apicultor, describiéndose en la bibliografía que estas
abejas agresivas acentúa el abandono de muchos apicultores, que dejan la
actividad.
Esta abeja sigue
eternamente la Regla de Farrar, manteniendo sus colmenas o enjambres en forma
permanente en un estadio juvenil, en virtud que constantemente enjambra. Estas
colmenas tienen permanentemente una proporción alta de cría, con respecto a
obreras pecoreadoras, porque continuamente se dividen en nuevas colonias.
Diagnóstico
A simple vista es
difícil diferenciar estas abejas de las europeas. Es necesario un diagnóstico
en laboratorio. Se utilizan métodos morfométricos en laboratorio, lográndose un
diagnóstico correcto de las colmenas africanizadas, pero no son lo suficientemente
sensibles para determinar las abejas híbridas.
Productividad
Hay autores que han
comparado estas abejas con razas europeas describiéndolas como más productivas
en kilos de miel, otros concluyeron en sus trabajos que son menos productivas y
otros no encontraron diferencias, no existiendo unanimidad en este criterio.
Pero se puede inferir mayormente que la africanización trae aparejada una
disminución en la producción de miel por dos motivos:
- Esta abeja híbrida
en zonas tropicales acentúa su ritmo de reproducción (enjambrazón) tendiendo a
una selección r más que las razas europeas de Apis mellifera que prácticamente
se comportan con selección K. Mientras una abeja europea como Apis mellifera
ligustica o Apis mellifera carnica puede producir de 1 a 3 enjambres, los híbridos
africanizados llegan a producir 9 o más enjambres por año.
A pesar que las razas
de abejas europeas llevan 500 años en el continente no se habían asilvestrado
como la abeja africanizada. La producción de miel está asociada indirectamente
con el apicultor, describiéndose en la bibliografía que estas abejas agresivas
acentúa el abandono de muchos apicultores, que dejan la actividad.
- Esta abeja sigue
eternamente la Regla de Farrar, manteniendo sus colmenas o enjambres en forma
permanente en un estadio juvenil, en virtud que constantemente enjambra. Estas
colmenas tienen permanentemente una proporción alta de cría, con respecto a
obreras pecoreadoras, porque continuamente se dividen en nuevas colonias.
Fuentes
Avispón asiático gigante
Clasificación
científica
Reino: Animalia
Filo: Artrópoda
Clase: Insecto
Orden: Himenóptera
Familia: Vespidae
Género: Vespa
Especie: V.
mandarinia
Nombre binomial:
Vespa mandarina
El avispón asiático
gigante (Vespa mandarinia), incluida la subespecie de avispón gigante
japonés (Vespa mandarinia japonica), coloquialmente conocido como la avispa
asesina, es la avispa más grande del mundo, originaria de zonas templadas y
tropicales de Asia del Este. Su longitud corporal es de aproximadamente 50 mm (2 pulgadas ), su
envergadura, es de aproximadamente 76 mm (3 pulgadas ), y tiene un
aguijón de 6 mm
(0,2 pulgadas )
que inyecta una gran cantidad de veneno.
Anatomía
Esta avispa es de
color naranja y bastante grande en comparación con otras especies de avispas.
Sus ojos compuestos y ocelos son de color marrón oscuro, y las antenas son de
color marrón oscuro con paisajes anaranjados. El clípeo (placa de escudo en la
parte frontal de la cabeza) es de color naranja; el lado posterior del clípeo
tiene lóbulos redondeados estrechos. La mandíbula es grande y de color naranja
con un diente negro (superficie de mordida interior).
El tórax y propodeo
(segmento que forma la parte posterior del tórax) del avispón gigante asiático
tiene un tinte dorado característico y un amplio escutelo (escala de escudo en
el tórax) que tiene una línea medial profunda; la placa detrás del escutelo
sobresale y domina el propodeo. Las patas delanteras de la avispa son de color
naranja, con tarsos de color marrón oscuro; los miembros posteriores son de
color marrón oscuro. Las alas son de un color marrón-gris oscuro.
El gáster (la parte
del abdomen, detrás de la conexión del tórax-abdomen) es de color marrón oscuro
con blanco, con bandas amarillas estrechas en los márgenes posteriores del
tergo, el sexto segmento es enteramente amarillo. Es similar en apariencia a la
avispa europea, Vespa crabro.
Distribución
geográfica
Se puede encontrar en
la región de Primorsky Krai de Rusia, Corea del Sur (donde se le llama; “Abeja
comandante”), China, Taiwán (donde se llama “Abeja cabeza de tigre”),
Indochina, Nepal, la India y Sri Lanka, pero es más común en las zonas rurales
de Japón, donde se le llama abeja gorrión gigante.
Picadura
El aguijón de la
avispa gigante asiática es de unos 6
mm (¼ pulgadas) de longitud, e inyecta un veneno
especialmente potente que contiene, al igual que muchos venenos de abeja y
avispa, un péptido citolítico (específicamente mastoparán) que pueden dañar los
tejidos estimulando la acción de la fosfolipasa. La sensación de la picadura se
describe “como un clavo caliente en la pierna”.
Un humano alérgico
picado por avispas gigantes puede morir a causa de una reacción alérgica al veneno,
el veneno contiene una neurotoxina llamada mandaratoxin (MDTX), un polipéptido
de cadena única con un peso molecular de aproximadamente 20.000 u, que puede
ser letal, incluso en personas que no son alérgicas, si la dosis es suficiente.
Cada año en Japón, la cifra de muertes humanas causadas por picaduras de
avispón gigante asiático es de alrededor de 30 a 40.
Depredación
El avispón gigante
asiático es intensamente depredador; caza insectos de mediano a gran tamaño,
como abejas, otras especies de avispas y mantis.
Estas avispas atacan,
a menudo, colmenas para obtener las larvas de abeja de la miel como alimento
para sus propias larvas. Un solo explorador, a veces dos o tres, con cautela se
acercan a la colmena y producen feromonas para dirigir a sus compañeros de nido
a la colmena. Los avispones pueden devastar una colonia de abejas melíferas:
una sola avispa puede matar hasta 40 abejas por minuto gracias a sus grandes
mandíbulas, que pueden atacar y decapitar a una abeja rápidamente. Las picaduras
de abejas son ineficaces porque las avispas son cinco veces más grandes y
demasiado blindadas. Relativamente pocas de estas avispas (menos de 50) tardan
un par de horas para exterminar una colonia de decenas de miles de abejas.
Después de masacrar a las abejas con impunidad, los avispones saquean la miel y
se llevan las larvas como alimento para sus propias larvas. Las avispas pueden
volar hasta 100
kilómetros (62 millas ) en un solo día, a velocidades de
hasta 40 km
/ h (25 mph ).
Los avispones adultos
no pueden digerir la proteína sólida, por lo que las avispas no se comen a su
presa, pero la masticar en una pasta con la que alimentan a sus larvas. Las
larvas, a su vez producen un líquido claro, mezcla de aminoácidos, que segregan
para alimentar a los adultos; las larvas de véspidos sociales generalmente
producen estas secreciones, aunque la composición de aminoácidos exacta varía
considerablemente de una especie a otra. La alimentación de avispas adultas por
las larvas se produce generalmente en avispas sociales depredadoras, y no está
restringido al género Vespa.
Aunque un puñado de
avispones gigantes asiáticos puede derrotar fácilmente las defensas no
coordinadas de una colonia de abejas, la abeja japonesa (Apis cerana japonica)
ha desarrollado una estrategia efectiva. Cuando un explorador avispón localiza
y se acerca a una colmena de abejas de la miel emite señales de feromonas
específicas. Cuando las abejas japonesas detectan estas feromonas, un centenar
se reúne cerca de la entrada del nido y establece una trampa, manteniendo la
entrada abierta.
Esto permite que el
avispón entre en la colmena. Cuando entra, una turba de cientos de abejas lo
rodea en una bola, que lo cubre por completo y evita que reaccione con
eficacia. Las abejas vibran violentamente sus músculos de vuelo, de la misma
manera que lo hacen para calentar la colmena en condiciones de frío. Esto
aumenta la temperatura de la bola a una temperatura crítica de 46 ° C (115 °
F). Además, los esfuerzos de las abejas elevan el nivel de dióxido de carbono
(CO2) en la colmena, las abejas de la miel pueden tolerar hasta 50 ° C (122 °
F), pero la avispa no puede sobrevivir a la combinación de una temperatura de
46 ° C (115 ° F) y el alto nivel de dióxido de carbono.
Algunas abejas mueren
junto con el intruso, pero al matar al explorador avispób le impiden invocar
refuerzos que acabarían con toda la colonia.
Fabricantes de
suplementos de avispón
Recientemente, varias
empresas de Asia y Europa han comenzado a fabricar los suplementos dietéticos y
bebidas energéticas que contienen versiones sintéticas de las secreciones de
las larvas de la Vespa mandarinia, que las avispas adultas suelen
consumir. Los fabricantes de estos productos hacen afirmaciones de que el
consumo de estas secreciones (comercializados como “jugo de avispa”) mejorará
la resistencia humana a causa del efecto que tiene sobre el rendimiento avispas
adultas. Debido a que estos productos se comercializan como suplementos
dietéticos, en lugar de productos farmacéuticos, no tienen que apoyar sus
afirmaciones. Algunos estudios han sugerido que la mezcla de aminoácidos
de Vespa, en sí, puede influir en el rendimiento animal en formas
menores.